Dicen que a veces hay que dar un paso atrás para dar dos adelante, así que vamos a tomárnoslo con esta filosofía. Después de dos temporadas en primera Nacional, nosotros, el primer equipo de La Salle Bonanova, volvemos a Lliga Catalana, esa categoría que tantas glorias y disgustos nos ha dado. Desde descensos en el último minuto (Kily lo sabe mejor que nadie), hasta ascensos apoteósicos (¿os acordáis de ese último penalti de Paso contra Bordils?). Bien, algún día nos dará tiempo de repasar todas las anécdotas que nos ha regalado esta división complicadísima en la que todos los rivales pueden arañar puntos. Pero la cuestión es que el sábado pasado volvimos a los lares de Lliga, que esta vez se demarcaron hasta Cambrils, Tarragona, una ciudad que si la memoria no nos falla, jamás pisamos con el primer equipo.

Handbol Cambrils es un club recién subido de Primera Catalana, venía de ascender de segunda, y el dato estaba en que «ningún equipo gana en su campo desde hace 4 años«. Todo un reto, para qué nos vamos a engañar. Al entrar en su pabellón ya se advertía un pista dura, fría, desangelada. El típico campo hostil, donde en seguida puedes entender que cantidad de equipos se dejen puntos allí. También es porque Cambrils tiene un bloque muy potente. Parte del equipo lo integran ex-jugadores veteranos de aquel Vendrell que subió a Nacional allá en 2009 y que tranquilamente podía puntuar contra una Roca en pleno auge. La Salle sabía de lo que eran capaces; sabíamos que si nos relajábamos, palmábamos sí o sí.

Como no, salimos mentalizados. Gerard Terrats debutada en el banquillo salesiano, un hecho que desde dentro anunciamos con mucha ilusión y orgullo, porque Terri compartió vestuario con varios de nosotros. Pero más allá de eso, y a pesar de las ganas que le teníamos al partido, salimos algo fríos (sobre todo en defensa). Cambrils se nos subió rápidamente a las barbas con un primer parcial de 4 goles (9 – 5) que nos obligó a parar la sangría. Broncote de Terri y reset. Así, tras el tiempo muerto, remontamos la desventaja mordiendo más en defensa y nos metimos otra vez de lleno en el match. Las dianas de Nacho Clemente desde 9 metros fueron vitales. A pie de campo, ver entrar sus lanzamientos por la escuadra, fueron como chutes de adrenalina que celebramos como espartanos. Aunque con el subidón no era suficiente: el pivote de los tarraconenses no nos lo puso fácil y menos aún su central número 13, Joaquín, quien fue un constante peligro en ataque y el foco de nuestros males. A la media parte perdíamos 14 – 13.

Sin embargo, en la segunda mitad, el guión cambió. Los locales salieron algo desconcentrados y lo aprovechamos para escaparnos de 3 goles con contraatques bien culminados por el «polivalente» extremo izquierdo Sergi Albors. Como era de esperar, no iba a ser un paseo de rosas, y a los 10 minutos Cambrils nos volvía a pisar los talones con buenas acciones con el pivote. Por suerte, Alex Martín de Nicolás no permitió que nos viniéramos abajo y paró esos balones cruciales que cuando estás en la pista dices, «Bf, menos de mal de Alex«. Total, que cuando peor pintaba el partido, encarrilamos una buena dinámica con otros tantos de Nacho y Buxeres que, no obstante, fue cortada de raíz por un totalmente inesperado apagón de luces del pabellón. Entonces era el minuto 25:50 de la segunda parte y ganábamos 25-26. Dicha situación se prolongó hasta los 15 minutos (aproximadamente), afectando lógicamente a la dinámica encarrilada hasta entonces. Cabe destacar que los últimos 4 minutos se disputaron sin que el marcador reflejara el tiempo. Un escenario surrealista. 

Tras reanudar el partido, pudimos rematar la faena con éxito, marchándonos de hasta 4 goles, la máxima diferencia que hubo entre ambos equipos. Resumiendo, fue un partido limpio, bonito y muy disputado hasta el final.

Felicidades equipo, especialmente a Gerard Terrats por su debut en el banquillo, y a Nacho Clemente, Victor Joanneau y Sergi Albors por su vuelta al primer equipo. Primeros dos puntos para la saca.

Acta: Enric Pascual (2), Max Durán (1), Javier Trias, Conrad Daubanton (1), Carlos Clemente, Sergio Rodriguez, Iker Jonama (2), Carlos Buxeres (4), Sergi Albors (4), Nacho Clemente (6), Victor Joanneau (2), Màrius Riba (8).